CENSADA
Para Ángel Nogueira Dobarro
Febrero con Acuario se hermanaron
para darme por fin su bienvenida
con un salvoconducto de salida
en el amanecer que diseñaron.
Los tres asentadores que sumaron
mi nacimiento más mi fe de vida
me dieron un visado de venida
me pusieron un nombre y me censaron.
Y desde entonces, censada me he sentido
desde mi corazón a mis zapatos
y desde mis zapatos a mis guantes.
Porque la libertad que me ha crecido
haciendo poesía y garabatos,
me ha censado el después, el hoy y el antes.
María Luisa Barea Gámez